Aunque las celebridades podrán quitarse la mascarilla para posar ante las cámaras en la alfombra roja, el Festival estableció unas condiciones de acceso estrictas
Mucha expectativa rodeaba la que sería la primera rueda de prensa del Festival galo que en el 2020 no pudo celebrarse y este año retrasó su cita habitual en mayo hasta julio con la esperanza, cumplida, de poderse realizar de forma presencial. En la primera rueda de prensa del Jurado encabezado por Spike Lee destacó la gran cantidad de periodistas, todos con mascarilla obligatoria, que acudieron a la cita desde diferentes partes del mundo y que para poder acceder al Palacio del Festival tuvieron que presentar una prueba negativa de Covid que hay que renovar cada 48 horas para poder seguir trabajando a menos de que se cuente con una vacuna europea homologada por Francia.
El Jurado presidido por Spike Lee y conformado por Myléne Farmer, Song Kang ho, Mati Diop, Mélanie Laurent, Jessica Hausner, Tahar Rahim, Maggie Gyllenhaal y Kleber Mendonca Filho acudió en pleno y también con la mascarilla que sólo se retiraron en el estrado al momento de hablar.
Spike Lee, que en el 2020 había sido elegido para ser Presidente de la edición fallida, recordó cómo su historia en Cannes comenzó en 1986 con su cinta «She’s Gotta Have It» y el honor que significa para él estar aquí, “estoy deseando comenzar”, dijo de forma escueta. Lee también recordó cómo cuando concursó de nuevo por la Palma de Oro en 1989 con el filme «Do The Right Thing», los más reacios con el filme fueron los mismos americanos porque se trataba de una crítica racial y social de los Estados Unidos en los años ochenta.
Y cómo, aunque han pasado 32 años desde ese filme en el que Spike aboga por los derechos de los afroamericanos todavía la gente negra, “sigue siendo cazada como si fueran animales” y mencionó el caso del asesinato de George Floyd. Después de dos preguntas dirigidas hacia él dijo que algo que quería promover era la igualdad así que por favor se le preguntará a los demás miembros del Jurado porque él ya no respondería más preguntas.
El director brasileño de Bacarau, Kleber Mendonca, dijo que esta noche sería la primera en una sala de cine tras 15 meses, “así que gracias Thierry”, agregó mencionando al Director del Festival. Maggie Gylllenhaal aprovechó la oportunidad para sumarse y decir que para ella también hoy sería la vuelta al cine desde que la pandemia empezó y contó cómo obtuvo la noticia de que había sido invitada para ser miembro del Jurado después de haber filmado una cinta muy intensa y estar de vacaciones en la playa. “No pude dejar de fantasear con lo que sería estar aquí desde entonces”, mencionó.
Mendonca también habló de la dramática situación de Brasil en la que el Covid ha sido una tragedia y cómo, “hay un estudio en el que se dice que más de 350,000 de personas podrían haber sido salvadas con lo que hemos aprendido que una forma de resistencia es tener información y distribuirla”, dijo en una rueda de prensa que será recordada por su seriedad.
En unas horas se realizará la primera alfombra roja de un Festival sin precedentes en el que abre la cinta «Annette», protagonizada por Adam Driver y Marion Cotillard y que es una coproducción mexicana.
Jodie Foster, Palma de Oro
El Festival otorgará además este martes la Palma de Oro de Honor a la actriz y directora Jodie Foster, que pisó Cannes por primera vez de niña hace 45 años, tras haber actuado con Robert De Niro en «Taxi Driver».
A la ceremonia de apertura asistirá también el director español Pedro Almodóvar, dos años después de que se le escapara la Palma de Oro con «Dolor y gloria». El premio se lo llevó finalmente la surcoreana «Parásitos».
Aunque las celebridades podrán quitarse la mascarilla para posar ante las cámaras en la alfombra roja, el Festival estableció unas condiciones de acceso estrictas: los europeos vacunados o con inmunidad natural deberán presentar el documento sanitario reconocido por la UE y el resto de asistentes deberá hacerse un test PCR cada 48 horas. Sin embargo, las salas no tendrán limitación de aforo.
Las restricciones de la pandemia harán que el Festival sea menos concurrido. Pero los cerca de 30 mil asistentes convivirán con los miles de veraneantes que tomaron las playas de esta lujosa localidad de la Costa Azul, una primicia puesto que el certamen se celebra habitualmente en mayo.