El realizador español presentó Madres paralelas, para la clausura de la 59 edición del Festival de Nueva York
Nueva York.— Desde que se supo que Madres paralelas cerraría la 59 edición del Festival de Nueva York, las entradas para las ocho funciones de la cinta se agotaron de inmediato.
La más esperada, sin duda, fue la noche de clausura en el auditorio Alice Tully Hall en la que Pedro, al lado de las actrices Penélope Cruz y Milena Smit, presentaron el filme con el que cerró el festival que el año pasado no pudo realizarse de forma presencial y que esta vez reunió a miles de personas en las salas que sólo pudieron acceder demostrando estar vacunadas o, en su defecto, tener una prueba negativa con menos de 48 horas de haberse realizado.
Pedro, radiante y cómodo en la que como él bien dice, considera su casa, salió al escenario a dar unas palabras antes de la proyección recibiendo una inesperada ovación en la que el público se puso de pie.
“Algo que me encanta de esta muestra es que no es una competencia, no tengo que competir en contra de alguien que admiro”; PEDRO ALMODÓVAR, Director de cine.
“Es muy emocionante para mí, lo agradezco porque todavía no han visto la película y no sé si les gustará”, bromeó haciendo reír al público.
Pero esa no fue la única oportunidad que tuvo para provocar las carcajadas entre los asistentes, pues el segundo momento vino con la confesión que hizo antes de llamar a Penélope Cruz al escenario.
“Para hacer esta película conté con dos actrices extraordinarias. Una es Milena Smit, una chica joven, sin experiencia, pero todo lo que hace respira una verdad imposible ignorar”.
Después se refirió a Penélope. “La otra es una actriz maravillosa, a quien recuerdo haberles presentado en este mismo escenario en 1997 con Carne trémula y desde entonces nos volvimos amigos muy cercanos. Durante todos estos años la he ido queriendo y admirando más. Y déjenme confesarles algo que quizá nunca antes haya dicho pero fue durante Volver, en donde ella es la protagonista absoluta, cuando sentí un profundo deseo heterosexual por ella. No hice nada, la respeté pero estaba muy cachondo con ella”, contó entre risas y aplausos.
“Cuando estoy haciendo una nueva película siempre me pregunto, ‘¿estaré en el Festival de Nueva York con esta cinta’, porque esta no es sólo mi casa sino que es un Festival que respeto y amo muchísimo. Algo que me encanta de esta muestra es que no es una competencia, no tengo que competir en contra de alguien que admiro”, apuntó.
Hubo sesión de preguntas y respuestas con el director y las actrices.
“Madres paralelas está relacionado con Julieta y con Dolor y gloria. También las cosas de las que hablo en estas tres películas me demandaban ese tono”, explicó el cineasta.